Hablamos cada vez más de las diferencias entre el web 2.0 y el internet ‘tradicional’. Y sin embargo, cada vez parece más cierto que, al menos por lo que a los actores respecta, web 2.0 será igual que web 1.0. ¿Es posible plantear un cambio de paradigma, como hacía O’Reilly, si los agentes son los mismos? Esto es altamente cuestionable. Pero, incluso si esto fuese así, entonces cabe pensar que los vencedores emergentes serían aquellos con una cultura de integración menos absorbente, más facilitadora de la propia expresión de los individuos (y de las organizaciones adquiridas) dentro de la propia empresa. Mi caballo ganador sería Yahoo! en este caso.